La falsificación del papel moneda es uno de los delitos que ha estado (y está) presente en España desde que en 1780 sustituyera a la incómoda bolsa llena de monedas. Uno de los momentos más “jugosos” para introducir en el mercado billetes falsos es cuando se modifica el diseño de alguno de ellos ya que, aprovechando que todavía no nos hemos habituado a su nueva apariencia (y que los dispositivos de detección de billetes verdaderos no están adaptados aún en todos los comercios), los que se dedican al innoble arte de la falsificación nos intentan “colar” sus propios billetes. En este sentido, y sabiendo que desde el 4 de abril circula un nuevo billete de 50€, os indicamos algunas características en las que debemos fijarnos para evitar engaños.

Como podemos observar el diseño es diferente, lo que favorece al falsificador, pero las medidas de seguridad se incrementan y es en algunas de ellas en las que debemos poner nuestra atención siguiendo la fórmula tan conocida de “TOCAR-MIRAR-GIRAR”.

Impresión en relieve, se aprecia al tacto. Como novedad hay unas líneas cortas en relieve en los bordes izquierdo y derecho del anverso.

 Al trasluz también se aprecia el hilo de seguridad que lleva el símbolo de € en los nuevos billetes. Otras diferencias respecto de la serie anterior son que en la marca de agua se observa el retrato de Europa (personaje de la mitología griega), además del motivo principal y el número “50” en otra posición, y que la ventana superior del  holograma se vuelve transparente y aparece el retrato de Europa por ambos lados del billete.

Una de las medidas de seguridad más difíciles de falsificar es la variación de la tonalidad de una tinta al observarla desde distintos ángulos, siendo una de las novedades que presenta el nuevo billete, donde el número “50” cambia su color del verde esmeralda al azul oscuro al girarlo y, en la ventana del holograma (donde al trasluz aparece el retrato de Europa), se observan unas líneas multicolor alrededor del número “50” en el anverso y varios “50” multicolor en el reverso.

Fuentes: Banco Central Europeo (https://www.ecb.europa.eu) y Banco de España (http://www.bde.es)