Ya que estamos en esa época estival y “viajera” en la que algunos van al encuentro del mar y sus playas, otros se encaminan al entorno silvestre y bucólico que ofrece la montaña, otros se dirigen a algún país desconocido digno de explorar, etc, desde el Laboratorio de Análisis Documental y Forense vamos a proponer un viaje muy “especial”, un viaje al interior de un trazo impreso con tóner “jugando” con los aumentos de un microscopio de uso habitual y otro electrónico de barrido.

A simple vista solo vemos tres “rayas” negras más o menos definidas: Nuestro viaje comienza “fabricando” con una impresora láser el lugar al que queremos ir, una letra “A” plasmada en un folio en blanco.

Pero, desplazándonos sobre nuestro peculiar vehículo, una extensa gama de lentes de aumento, descubrimos poco a poco el fantástico micromundo de nuestra letra “A”

Y, si aumentamos la profundidad de nuestro viaje hasta casi alcanzar el nanomundo de nuestra letra “A”, el espectáculo estamos seguros que no os dejará indiferentes.

Aquí están nuestras partículas de tóner, enredadas en las fibras de papel (aumento de 1.200 veces su tamaño original mediante el microscopio electrónico de barrido).